24 de febrero de 2012

Hubble descubre un nuevo tipo de planeta (exoplaneta acuoso)


Representación artística del exoplaneta GJ 1214b
El telescopio espacial Hubble ha descubierto un nuevo tipo de planeta extrasolar, se trata de un mundo que bien se puede calificar de acuoso, cubierto por densa atmosfera de vapor.

En palabras del astrónomo que ha lidera al equipo que ha descubierto este planeta "GJ 1214b es como ningún planeta que conocemos",  "Una gran parte de su masa se ​​compone de agua".
GJ1214b se encuentra en la constelación de Ophiuchus, y tan sólo 40 años luz de la Tierra, esta súper-Tierra es de aproximadamente 2,7 veces la Tierra de diámetro y pesa casi siete veces más. Orbita una estrella enana roja cada 38 horas a una distancia de 2 millones de kilómetros, por lo que se estima que su temperatura sea de 230 grados centígrados.

EL equipo internacional de astrónomos liderados por Zachory Berta, del Centro Harvard-Smithsonian para Astrofísica, junto a Derek Homeier de la ENS Lyon, usaron la cámara WFC3 (Hubble Wide Field Camera 3, cámara de gran angular 3) para estudiar GJ 1214b durante transito sobre su estrella anfitriona, la luz de la estrella que se filtro a través de la atmósfera del planeta, ha dado la clave para determinar la dando pistas la mezcla de gases que compone la atmósfera.

Según Z. Berta "Estamos utilizando el Hubble para medir el color de infrarrojos de la puesta de sol en este mundo", dado que las Brumas son más transparentes a la luz infrarroja que a la luz visible, las observaciones del Hubble ayudará a determinar la diferencia entre un vapor y un ambiente brumoso. El amplio intervalo de longitudes de onda que presenta el planeta GJ 1214b  en las mediciones de Hubble sugiere un modelo atmosférico con una densa atmósfera de vapor de agua.

A partir de la masa y tamaño conocido del tamaño, los astrónomos han calculado que la densidad es de sólo 2 gramos por centímetro cúbico. El agua tiene una densidad de 1 gramo por centímetro cúbico, mientras que la densidad media de la Tierra es de 5,5 gramos por centímetro cúbico. Esto sugiere que GJ 1214b tiene mucha más agua que la Tierra, y una menor cantidad de roca que la Tierra.

Como resultado, la estructura interna de GJ 1214b sería extraordinariamente diferente de la de nuestro mundo. "Con estas presiones y temperaturas tan altas se forman materiales exóticos como Hielo Caliente y Agua Súper-fluida, sustancias que son completamente ajenas a nuestra experiencia cotidiana" dijo Z. Bertha.

Los teóricos esperan que GJ 1214b formó más lejos de su estrella, donde el hielo de agua era abundante, y emigraron hacia el interior en la historia temprana del sistema. En el proceso, habría pasado a través de la zona habitable de la estrella, donde las temperaturas de la superficie sería similar a la Tierra. ¿Cuánto tiempo se quedó allí es desconocido.

La cercanía del planeta a 40 años luz lo convierte en un candidato ideal para ser estudiado por la futuro telescopio espacial  James Webb del consorcio NASA, ESA , CSA.

4 de febrero de 2012

Detectada una súper-Tierra en zona de habitabilidad


Un equipo internacional de científicos liderado por Guillem Anglada Carnegie-Escudé y Paul Butler, ha descubierto un exoplaneta de tipo súper-Tierra potencialmente habitable, orbitando una estrella cercana según anunciaron los autores del descubrimiento el pasado 2 de febrero en Washington.
La estrella anfitriona es una estrella fría en la constelación del Escorión que forma parte de un sistema estelar triple, y tiene una composición muy diferente a la de nuestro Sol, al ser relativamente carente de elementos metálicos.  Con este descubrimiento se demuestra que los planetas habitables podrían tener una variedad de ambientes mayor de la que se había predicho.

El equipo utilizó datos públicos del ESO (Observatorio Europeo Austral) e incorporó nuevas medidas de alto el espectrógrafo de alta resolución del Observatorio Keck y del nuevo espectrógrafo Buscador de Planetas de Carnegie en el Telescopio Magellan II. Su técnica de búsqueda de planetas, consiste en la medición de los pequeños bamboleos orbitales de una estrella en respuesta a la gravedad de un planeta. Anglada-Escudé y su equipo se centró en una estrella enana M-clase llamada GJ 667C, situada a 22 años luz de distancia del Sol. Se trata de un miembro en un  sistema triple. Las otras dos estrellas (GJ 667AB) son un par de naranjas enanas tipo K, con una concentración de tan solo un 25% de elementos pesados comparados con nuestro sol. Dichos elementos son los bloques de construcción de planetas de tipo rocoso, por lo que se pensaba que los sistemas con estos bajos niveles de elementos pesados no podían contener planetas rocosos.

Estrella enana de clase M,  GJ 667C (CDS / ESO)
En la estrella GJ 667C se había observado previamente una súper-Tierra (GJ 667Cb) pero su con período orbital de tan solo 7,2 días, hizo que este hallazgo no se publicó nunca. La órbita es muy cercana a la estrella lo que la hacía muy caliente para estar en zona de habitabilidad. El nuevo estudio se inició con el objetivo de obtener los parámetros orbitales de la súper-Tierra, pero además de este primer candidato, el equipo de investigación encontró que la señal clara de un nuevo planeta (GJ 667Cc) con un período orbital de 28,15 días y una masa mínima de 4,5 veces la de la Tierra. 
El nuevo planeta recibe el 90% de la luz que recibe la Tierra. Sin embargo, porque la mayor parte de su luz entrante es en el infrarrojo, un mayor porcentaje de esta energía entrante debe ser absorbida por el planeta. Cuando estos dos efectos se tienen en cuenta, el planeta se espera para absorber la misma cantidad de energía de su estrella que la Tierra absorbe del sol. Esto permitiría que las temperaturas superficiales similares a la Tierra y la posibilidad de contener tal vez agua líquida, aunque aún no se puede confirmar sin más información sobre la atmósfera del planeta.
En palabras del investigador principal Anglada-Escudé  "Este planeta es el mejor candidato para tener agua líquida y, quizá, la vida tal como la conocemos". El equipo señala que el sistema también pueden contener un planeta gigante gaseoso y otra súper-Tierra con un período orbital de 75 días. Sin embargo, se necesitan más observaciones para confirmar estas dos posibilidades.