Podría decirse que en cada estación tiene una constelación que destaca frente a las demás y personaliza el cielo en determinadas latitudes de cada hemisferio. Así en la península Ibérica (entre 36º y 43º del hemisferio norte), el cuadrado de la constelación de Pegaso el foco del cielo de otoño, en invierno la constelación Orión, en primavera Bootes (Boyero, pastor de bueyes). Pero en verano sobre las constelaciones de Casiopea, Escorpio, Hércules, destaca una figura triangular situada sobre nuestro cenit, está figura o asterismo llamada "El Triángulo de Verano", está formada por las estrellas Vega (la quinta estrella más brillante del cielo, y hablando en ficción origen de las emisiones extraterrestres de la novela de Carl Sagan "Contact") en la constelación de Lira, Deneb la estrella más brillante del Cisne y Altaír la estrella principal de la constelación de Águila.
El triángulo de verano es visible durante toda la noche, en la fotografía de arriba podemos verlo sobre el cielo de Badajoz. En la imagen se ha superpuesto las líneas del "Triángulo de Verano", así como la forma de cruz del Cisne (también llamada la Cruz del Norte), Lira y Águila.
Los tres vértices delimitan parte del brazo visible de la Vía Láctea, en cuyo interior pueden observarse varios de los objetos de cielo profundo más bellos del verano (aunque para ellos ya sea necesario el uso de telescopio). Objetos como M57 la Nebulosa del Anillo, la Nebulosa Norteamericana, el cumulo globular de M56 y la Nebulosa del Velo.
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